(Resteado en la Noticia. 10 de Febrero de 2017)-La vida de una mujer cambia radical y maravillosamente cuando se es madre, pero este reto maternal puede llegar con mayor desafío, ése fue el caso de María Eugenia Iglesias, a su hijo se le diagnosticó diversidad funcional.
A partir de allí tomó la decisión de dejar de ejercer su carrera como publicista para explorar profesionalmente un mundo que le permitiera comprender a su primogénito y acercarse mucho más a él. Para mantener ese vínculo íntimo entre madre e hijo siguió el camino psicoterapeuta, que lo acompañó con la especialización en terapeuta psicosocial, su actualización es constante.
Pero María Eugenia no se quedó en esa etapa, preocupada por las dificultades económicas que atraviesan las familias para cubrir el pago de las terapias y la amplia desinformación que existe entre los parientes para el tratamiento de este colectivo, el 1° de mayo pasado ella creó la Fundación para la Diversidad Funcional, la cual coordina desde su inauguración. "Mi hijo replanteó mi vida, me ha permitido estar en un espacio que ha cubierto mis expectativas de poder ayudar a otros", expresó la madre.
En esta organización reciben terapia mensualmente 45 niños, entre autismo, asperger, síndrome de down, superaprendizaje, dificultad motora, visual y auditiva. La cantidad de beneficiados asciende a 300 si se incluyen adultos contemporáneos y mayores.
Con esta atención la institución persigue defender los derechos de este importante grupo, porque "antes de tener una condición, son personas y merecen un espacio en la sociedad", recalcó la psicoterapeuta. Para lograr ese propósito, personal capacitado comienza desde el seno familiar, los preparan brindándoles la información necesaria para que conozcan a su hijo y les entregan las herramientas necesarias para potenciar sus habilidades.
Potencial al máximo
Actividades deportivas como natación, además de la preparación de alimentos que puedan consumir, el aprendizaje cultural por medio de la pintura, es parte de la enseñanza que reciben los más pequeños para reforzar sus aptitudes en diferentes áreas.
El equipo de terapeutas también trabaja en el proceso de integración del niño con la aplicación del aula psicoeducativa, que ayuda a que el infante se adapte a las peticiones del docente en un salón de clases, como por ejemplo, mantenerse sentado. Su salud y alimentación también es atendida en una área que fue habilitada para el proyecto social Barrio Adentro que atiende a la comunidad.
Para la psicoterapeuta es importante que el tratamiento en cada etapa de la vida sea personalizado, para obtener mejores resultados que beneficien su calidad de vida.
Esta loable labor que realizan psicólogos clínicos, psicopedagogos, terapeutas psicosociales, no tiene un monto obligatorio a cancelar, salvo el aporte que deseen y puedan entregar los familiares cuyo pariente asiste a estas terapias, que en la actualidad tienen un costo de 7 mil bolívares y en ocasiones deben realizarse tres en un día.
El club de los abuelos es otro espacio con el que cuenta la fundación, reciben más de 30 adultos mayores semanalmente que participan en actividades como paseos al Centro Termal Las Trincheras, en el municipio Naguanagua, recientemente disfrutaron de la naturaleza en una finca en Barrera, en Libertador.
Dinámicas para ejercitar la memoria y la música integran el cronograma, reciben clases de instrumentos como cuatro y se presentan en actividades folclóricas con el aprendizaje previo del joropo "bien zapateao".
¿Cómo ubicar y ayudar a la fundación?
En caso de que deseen que su hijo asista o usted, como familiar, requiera de orientación, puede llamar a: 0241-835.36.42/ 0426-540.36.40.
También están en Facebook como Fundadiversidad, en Twitter @fundadiversidad. La sede está en la urbanización popular Don Bosco, parroquia Miguel Peña.
FUENTE: Notitarde
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