En el Orinoco nadaron contra la crisis

 (Valencia, 02 de Mayo. Resteado en la Noticia)-El paso a nado del Orinoco y el Caroní, el tradicional cruce a brazo y pierna de las aguas dulces de Guayana, cumplió 28 años. En medio de cambios de fechas, dificultades de traslados y constante aumento de precios que alteraron la planificación, el estado Bolívar recibió una vez más a los nadadores venezolanos que se reúnen para atravesar los ríos más caudalosos del país en un punto en el que las aguas se encuentran aunque no se mezclan.

 Este año la Alcaldía de Caroní apenas logró que 650 nadadores de 11 estados del país se inscribieran en la competencia, a la que solo lograron movilizarse 464 atletas.

 El día del evento, subieron a la simbólica gabarra colorida 355 deportistas (260 hombres y 95 mujeres), para trasladarse desde San Félix a los Barrancos de Fajardo, el punto de partida. En un lugar donde solía observarse una multitud vistiendo trajes de baño, sorprendía lo vacío de la embarcación.

 Ana Maita, de Distrito Capital, pensó en dejar de participar esta vez por falta de presupuesto. A pesar de ser una atleta experimentada en la disciplina, y particularmente en el evento, no se inscribió; semanas antes del cruce, tuvo una inesperada oportunidad de cubrir la logística y pudo acudir.

 Antonio Saint-Aubyn, el conocido cumanés “Toño”, mantuvo la tradición y sumó su vigésimo sexto registro y el primer lugar de su categoría a pesar de tener condiciones de salud adversas. Federico Zappi, quien ha nadado los ríos por más de 10 años, reside desde hace nueve meses en Italia pero vino a Venezuela el jueves 19 de abril, viajó a Puerto Ordaz el viernes 20 y el domingo 22 se subió a lo más alto del podio en su categoría.

 Este año los campeones fueron del estado Lara. Juan Morlés fue el primero en cruzar la meta y marcó 34 minutos 49 segundos. La guara Vicenia Navarro conservó su título como ganadora absoluta con un registro de 42 minutos 11 segundos.

 Navarro se ha hecho de la prueba en cuatro ediciones (2012, 2014, 2017 y 2018) y asegura que para ganar solo hay que tener ganas. “Lo fundamental es trabajo, constancia, disciplina y dedicación. Hay que intentar hasta lograrlo y volver”, remata. Días antes del cruce murió su entrenador y fue “un motivo más para ganar”, dice.

 Una prueba que sorprende. Si hay algo en lo que coinciden quienes se lanzan a los ríos es que esta competencia siempre es distinta. A pesar de que todos los años se parte en el Orinoco desde el estado Monagas, en el mismo lugar de los Barrancos de Fajardo y se llega a la meta en el Caroní por el muelle de San Félix, las aguas presentan variaciones.

 Este año los ríos se mostraban más bajos. Hubo brisa en dirección contraria de la corriente y los nadadores debían seguir una línea mental buscando referencias fuera del agua porque no es una ruta marcada. Estrategia, planificación y entrenamiento son necesarios para cubrir el recorrido de 3.100 metros del caudal marrón y tibio que va a chocar contra una fría y negra corriente.


FUENTE: El Nacional
Previous Post
Next Post
Related Posts

0 comments: